DESPROGRAMANDO Y REPROGRAMANDO, otra manera de entenderlo:
¿Os ha pasado alguna vez que tenéis muy claro algo en vuestra cabeza, entendéis el cambio que queréis realizar y lo importante que es, los pasos que tenéis que dar y los beneficios que vais a obtener cuando lo hagáis, pero... no hay manera de hacerlo ?
Muchas veces hay una oposición y una lucha interna entre lo que queremos para nuestra vida, y lo que hacemos para conseguirlo, muchas veces tiene que ver con el hecho de que tenemos programas, memórias y informaciones que nos hacen ir hacia el otro lado.
Pretendo ofrecer una explicación de la terapia energética que puede ser también válida para aquellas personas que no contemplan las vidas pasadas o ni siquiera la existencia de un alma.
Si nos consideramos como un ordenador (los microprocesadores fueron desarrollados en base a la ciencia del cerebro humano) , nos damos cuenta de que al igual que el ordenador, el cuerpo humano tiene un dispositivo donde almacena toda la información y los recuerdos, y que disponemos de una serie de programas desde nuestro origen Hay programas que un momento dado nos fueron muy útiles, porque nos permitieron realizar aprendizajes que necesitábamos en aquellos momentos, incluso hay muchos programas que nos permitieron sobrevivir, como por ejemplo, un programa de agresividad o de rabia intensa. Hay programas que son imprescindibles para nuestro funcionamiento armónico, como por ejemplo, los programas de autoconocimiento, o los programas de tolerancia.
Hay otros programas que en estos momentos han quedado obsoletos y nos resultan poco prácticos, ocupando espacio para otros programas más enriquecedores y innovadores, por ejemplo un programa sobre unas creencias religiosas, que podría reemplazarse por algún programa de conciencia espiritual.
También hay otros programas que en este momento nos resultan perjudiciales y limitantes, dándonos una percepción errónea de la realidad, por ejemplo, un programa de la bisabuela materna que dice que las mujeres tienen que casarse y tener hijos.
También muchos programas de virus que interfieren en nuestras actividades y proyectos actuales, dificultándolos e incluso imposibilitándolos, por ejemplo, mensajes del tipo: "eres un inútil, nunca haces nada bien".
¿Que hacemos con estos programas? DESPROGRAMAMOS y liberamos todos los programas, incluyendo memorias y todo tipo de energías -pensamientos, emociones, creencias... que ya no nos sirvan.

Aquí os explico lo que yo he experimentado a través de la experiencia, así que es posible que para algunas personas sea válido y no para otras:
A veces esta información o programas no están muy arraigados, puede que los hayamos cogido de la educación que hemos recibido y es suficiente con nuestra intención y consciencia para reemplazarlos por otros más coherentes o afines a nosotros ahora.
A veces son programas que vienen del papá o la mamá, estos suelen ser abundantes , también podemos liberarlos con consciencia, si vienen de muy atrás, es decir, del linaje familiar, a veces es un poco más de trabajo, porque suelen estar grabados a diferentes niveles de consciencia, como en nuestra mente, en nuestras emociones, es posible que también estén en las células y en diferentes órganos físicos...
Pueden ser programas que cogemos de la sociedad en la que vivimos y en su momento histórico, o programas de otras sociedades y momentos históricos que ya habíamos experimentado en nuestro pasado. A veces programas que no nos pertenecen, y son de algún amigo o compañero. Incluso hay gente que actúa como esponjas, recogiendo todo tipo de programas e informaciones de su entorno, del inconsciente colectivo.

Conozco algunas maneras de desprogramar y reprogramar, una de ellas que se puede realizar en casa y por nuestra cuenta es el tapping*, muy efectiva porque no es necesario disponer de toda información sobre el origen del programa.